Onda Encantada de la Luna Roja

Luna 1: El propósito es seguir aprendiendo a sentir, hacer contacto con nuestras emociones, las que sean, sin juzgarlas, darles cauce, validarlas, escucharlas, permitirlas. Conmovernos. Confiar, dejándonos llevar por la inteligencia de las fluctuaciones anímicas que vienen a mostrarnos información rica sobre nuestra singularidad. Los matices sensibles son brújula de las decisiones que tomamos: qué elegimos, con qué cualidades, qué necesitamos. Todo lo que no puede ser cuantificado, o explicado, es la Luna, y nos constituye desde nuestro origen y misterio.

Perro 2: El desafío del que estaremos aprendiendo será lidiar con el dolor, o cualquier emoción desagradable, que surge ante aquello que amamos y no se da tal como nos gustaría; que requiere aceptar limitaciones, distancias, duelos, desilusiones.

Mono 3: La motivación vendrá cuando nos animemos a sentir sin dramatizar, pudiendo navegar la espesura con paradójica soltura y liviandad.

Humano 4: Contamos con el recurso del libre albedrío, de la capacidad de elegir cómo responder. La validación del propio sentir, de los propios deseos, de los propios límites.

Caminante del Cielo 5: Nos empoderamos animándonos a entrar en nuestros rincones íntimos, más sensibles, vulnerables, llenos de sabiduría, tesoros de información.

Mago 6: Sostenemos el proceso mirando hacia adentro, haciendo introspección, registrando la plenitud existencial del aquí y ahora.

Águila 7: Nos inspiramos tomando distancia y mirando todo desde un lugar más amplio.

Guerrero 8: La coherencia vendrá dada por defender nuestra singularidad, aunque sea incómodo.

Tierra 9: Los logros se darán sintonizando con las circunstancias, las puertas que se vayan abriendo para seguir fluyendo, sintiendo y purificando.

Espejo 10: Profundizaremos observando los sucesos en sus detalles, con precisión, tal como estén siendo.

Tormenta 11: Nos liberaremos con descargas, catarsis, limpias potentes.

Sol 12: Compartiremos lo aprendido con amor incondicional, abrazando la complejidad de nuestras existencias.

Dragón 13: Finalmente, recibiremos el regalo del renacimiento. Ver con nuevos ojos, otro destino, otra identidad.