A continuación de plantearnos el propósito, se presenta el desafío (Tono 2 - Lunar); cuando nos disponemos a escuchar el alma y comunicarnos desde el espíritu, hay algo tan sutil, tan "pequeño", tan invisible, que a veces se nos escapa.
La Noche Azul es la posibilidad de ver en la oscuridad, en lo más profundo y misterioso. Con ella podremos adentrarnos en el camino hacia nuestro interior más puro gracias a las maravillas de la abundancia y la intuición que animan nuestros sueños.
La Noche Azul nos permite navegar siguiendo las estrellas; moviéndonos sin mapas, precedentes ni explicaciones lógicas. Lidiamos con el enigma de la vida misma: estar encarnadxs y tener un sinfín de posibilidades.
¿Cuál es la verdad de mi corazón?
• Esta Noche está guiada por el Águila Lunar, quien tiene la capacidad de mirar la totalidad, el paisaje completo desde las alturas. Protegida de distracciones que obnubilan la percepción, establecida en el presente sin tiempo, la agudeza de su visión permite crear la realidad que añora en su corazón, provocando milagros.
• Le acompaña el Guerrero Lunar, quien se atreve a cuestionar los límites mentales y las estructuras sociales anquilosadas, abriendo los caminos para moverse y crear en confianza y libertad.
• Está aprendiendo del Caminante del Cielo Lunar, quien se aventura a explorar nuevas tierras, expandiendo el espacio (interespecie e interestelar), trayendo perspectivas más apropiadas, responsables y cuidadosas para nuestra humanidad.
• Y tiene el poder del Espejo Cristal, quien devela la información genuina que emerge de todo proceso de sanación, aportando orden y verdad para todas las partes.
